¿Cómo prevenir las úlceras por presión?

En esta entrada vamos a hablar de la prevención de las úlceras por presión en las personas que permanecen mucho tiempo sentadas.

 

La úlcera por presión (escara) es una lesión que se produce por la muerte celular debido a la falta de oxígeno en el tejido. Esta falta de oxígeno se produce por varios motivos y suele ser la combinación de ellos lo que lleva a la producción de la misma.

Los puntos de presión a los que se enfrentan las personas que permanecen mucho tiempo sentadas son los que aparecen en la imagen, por tanto son las zonas especialmente sensibles a sufrir úlceras por la presión.

Aunque se asocia siempre al tiempo de permanencia, hay factores que pueden acelerar su aparición, o incluso ser suficientes por si solos para producirlas. Estos factores están siempre sujetos al posicionamiento, y el peor de ellos es la fricción.

 

 

La edad y situaciones de enfermedad o accidente que llevan al paciente a no poder moverse con normalidad, son las causas principales de que la persona deba permanecer mucho tiempo sentada (por ejemplo por estar en silla de ruedas), estando expuestos a sufrir estas úlceras.

De forma esquemática podemos decir que los factores que influyen en la aparición de la úlcera por presión son:

 

 

Posicionamiento:

Debe ser correcto para que no se produzca fricción. La ergonomía es importantísima. En el mercado encontraremos productos que nos ayudan a mejorarlo, pero es necesario saber cómo funciona una buena higiene postural.

Tendremos que tener en cuenta tanto la estabilidad de la superficie, como la posición del cuerpo.

Hay personas que bien por edad, o bien por su situación física no son capaces de mantenerse sentados correctamente. Si los nervios sensitivos están afectados ,el paciente no tendrá la capacidad cognitiva de saber si la posición le es incómoda o no, y una simple arruga de la superficie donde se sienta puede ser peligrosa.

Por tanto los puntos más importantes a tener en cuenta son:

• No juntaremos una superficie blanda, con un cojín también baldo, ya que esta unión aumenta la posibilidad de desequilibrio postural. Sí podremos usar cojines blandos para los laterales y para corregir las posibles desviaciones de columna, para conseguir que la posición sea lo más estable posible, evitando deslizamientos del paciente.
• La espalda y las nalgas deben estar totalmente pegadas a la superficie del asiento, y los pies deben quedar apoyados, quedando las rodillas ligeramente separadas del asiento y que se pueda introducir la mano con algo de presión por debajo de la pierna.

Intentaremos igualmente que en situaciones de larga duración ( más de 6 horas seguidas en posición sentada) , este la cabeza también bien apoyada para que el descanso sea mayor.

 

Humedad e higiene :

Otro riesgo importante y que puede acelerar la aparición de úlceras, además de otros problemas de la piel es la incontinencia. Muchos pacientes que pasan muchas horas sentados en silla de ruedas o en casa por diversas situaciones sufren de incontinencia urinaria. Además de ser un problema por la exposición de la piel a la humedad y a la orina, nos encontramos que el uso de pañales van a empeorar el posicionamiento y el confort del paciente sentado.

En estos casos la mejor recomendación es el uso de cremas protectoras o efecto barrera. Hoy en día existen varias marcas que ayudan en estos casos. A nosotros nos gustan, por su efecto, aquellas fórmulas con óxido de zinc. Además lo tendremos en cuenta a la hora de elegir el material del cojín preventivo, que debe ser lavable y antideslizante.

Otro caso también es la humedad producida por la sudoración, que puede ser importante en verano por el calor. Para ello tendremos que usar cojines que además de tener fundas lavables, tengas la capacidad de adaptar el cojín a la temperatura corporal.

En la higiene diaria se tendrá que comprobar como va la piel, sobre todo en aquellas partes que soportan más el peso y la fricción, isquios y sacro. En el momento que aparezcan rojeces tendremos que prevenir con el uso de cremas haciendo un pequeño masaje y con cojines que reduzcan esas presiones (por distintos sistemas de flotación). En estos estados iniciales donde todavía no hay escara, aumentaremos la aplicación diaria de lociones, aunque es un buen momento de empezar con el uso de aceites oxigenados combinados con lociones  y nos sirvan de preventivo. Si siguen apareciendo rojeces o empeora la situación pasaremos al uso del aceite oxigenado puro.

Elección del producto

A la hora de elegir el cojín antiescaras adecuado, hemos desarrollado el siguiente esquema que esperamos sea de utilidad.

Características del material que debemos tener en cuenta:

Flotación:

Existen tres maneras de conseguir que los pesos y las posibles deformaciones o prominencias óseas no sean un problema en la aparición de úlceras por presión.

• Uso de productos viscoelásticos o de poliuretano sanitarios. (con una resistencia superior a 40 Kg/m 3)
• Usos de líquidos en forma de geles. Sistema de flotación líquida.
• Uso de aire.

Las tres intentan que el reparto de pesos sea correcto pero el uso de cada uno de estos materiales varia en función del paciente, su actividad y el uso que queramos hacer con el cojín.

Aunque las tres son válidas, a nosotros nos gusta recomendar el sistema de flotación líquida cuando queremos afianzar una superficie poco homogénea o blanda (sillón domestico blando), o cuando el paciente va en silla de ruedas y sufre muchos impactos en el movimiento (subir y bajar escalones, ir mucho tiempo por la calle), ya que con ella con ella se consigue una mayor confianza muchas veces del paciente, pues nota el reparto del gel en el movimiento, aumentando la sensación de seguridad.

Ligereza:

De los tres sistemas de compensación de pesos (Aire, Viscoelástico, Gel ), hay uno de ellos que destaca por lo ligero que es. El aire es un sistema que nos va a permitir regular de forma individualizada como queremos el reparto de pesos. Esto es beneficioso si tenemos que acoplar el cojín a diferentes sillas.

 

Adaptación temperatura corporal:

Esta característica la tienen los materiales tipo gel o silicona, siendo este último el que más capacidad tiene de adaptarse a la temperatura corporal. Estos materiales pueden venir muy bien para que no se produzca una sudoración excesiva y por tanto una posible maceración de las posibles heridas, retrasando la curación y aumentado el riesgo de infección. Será ideal por su capacidad de adaptación a los pesos y presiones y por su capacidad de controlar el calor en la zona. Su uso en escaras activa el tratamiento.

 

Masaje Viscodinámico :

Esta característica nos la podemos encontrar en productos cuya composición es íntegramente silicona sólida. El propio movimiento del paciente hace que el cojín produzca un masaje en la zona, aliviando las molestias que se producen por estar mucho tiempo sentado y las que se producen por una úlcera activa. Su composición lo hace ideal como el gel, para superficies blandas.

 

Celdas independientes de aire:

Está característica la tienen los cojines que funcionan por aire, y lo hacen además por celdas independientes pequeñas. Estas celdas interconectadas entre si le dan un poder de adaptación perfecto, manteniendo el peso y el cuerpo del paciente en una flotación ideal. Estará indicado para úlceras activas y sobre todo para pacientes con lesión.

 

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